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Somos uno de los primeros centros españoles en administrar la medicación intramuscular para pacientes con VIH

26/06/2023
Somos uno de los primeros centros españoles en administrar la medicación intramuscular para pacientes con VIH

Gracias a la combinación de dos medicamentos, Cabotegravir y Rilpivirina, la medicación antirretroviral que se ofrece a los pacientes con VIH por vía oral a diario, ahora se puede administrar de forma intramuscular, mediante inyecciones, cada dos meses.

Durante los últimos 8 años, la Fundación Lucha contra las Infecciones ha liderado 3 ensayos clínicos (LATTE-2, ATLAS y ATLAS-2M) que comportaban la administración de los dos fármacos a los pacientes que participaban en esta investigación clínica. Este hecho nos ha permitido ser uno de los primeros centros de España en ofrecer la medicación a nuestros pacientes y tener la oportunidad de formar al personal de enfermería de otros centros hospitalarios en su administración.

Formaciones específicas

Como centro de referencia, la Fundación ha llevado a cabo cuatro formaciones destinadas mayoritariamente a equipos de enfermería de otros centros hospitalarios. En concreto, las formaciones que hemos realizado son:

22 de marzo de 2022. Formación dirigida principalmente a personal de enfermería hospitalaria, aunque también asistieron farmacéuticos y médicos especializados.

20 de septiembre de 2022. Formación dirigida a personal de enfermería de centros penitenciarios, aunque también asistieron médicos especializados (todos ellos de centros penitenciarios).

7 de febrero de 2023. Formación dirigida principalmente a personal de enfermería.

23 de mayo de 2023. Formación dirigida principalmente a personal de enfermería. 

Valoración de los beneficios clínicos y psicológicos de este nuevo fármaco

De cara a los pacientes, el hecho de poder disponer de esta medicación intramuscular y administrable cada dos meses supone una mayor comodidad en el seguimiento de su pauta terapéutica y, en consecuencia, una mejor calidad de vida. A estos beneficios clínicos es importante sumar también la disminución de la presión psicológica que supone convivir con la infección del VIH y que, en buena medida, se asocia a la toma diaria del tratamiento.

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